jueves, 5 de noviembre de 2015

Despatriarcalizando la despatriarcalización



Por: Raúl Rosales León

El pasado sábado 30 de Octubre (día de la música criolla y Halloween) asistí a una conferencia en la librería La Libre de Barranco sobre la despatriarcalización expuesta por María Galindo quien es una de las fundadoras del colectivo de Mujeres Creando de Bolivia.  Me llamó la atención que antes de iniciar la conferencia, ella solicitó que las luces del pequeño espacio de La Libre se apagarán para alumbrar solamente a ella para su performance discursiva. María Galindo empezó señalando que la despatriarcalización es un concepto creado por ella para enfrentar la tesis de la igualdad de género; ella zanjó una frontera política: quienes están en las orillas de la tesis de la igualdad de género son borregas que aceptan la imposición del Banco Mundial, viven de la tecnocracia de género burocratizadas en las ONGs y el Estado y, sobre todo, son institucionalizadas que causaron la domesticación del feminismo.   

A partir de su exposición, María Galindo abrió una rueda de intervenciones en donde varias asistentes (jóvenes) coincidieron con la tesis de la despatriarcalización hasta el momento que levanté la mano para intercambiar algunas ideas. Inicie mi participación reconociendo la importancia de plantear tesis, y como toda tesis estaba sujeta a observaciones, las cuales hice en formato de preguntas. Luego ella tuvo la oportunidad para profundizar su tesis complementando con otras ideas, casos y ejemplos, pero dijo: “no tengo nada que decirle”, aduciendo que su tesis estaba clara y que yo estaba confundido.

Pueden surgir varias hipótesis sobre su silencio al debate, por una parte ella no tenía respuesta, por otra ella es intolerante a visiones que discrepan o porque era hombre heterosexual normativo.  Me inclino por la segunda hipótesis para empezar la desconstrucción de la despatriarcalización.   

María Galindo demostró en palabra y acción que la despatriarcalización es un discurso que se aísla de cualquier debate democrático. La despatriarcalización es una verdad absoluta y, por tal motivo no puede entrar en el terreno de la confrontación de ideas, sino en el ámbito de la imposición.  La actitud de María Galindo me hizo recordar los análisis de Carlos Iván Degregori sobre Sendero Luminoso y, en especial, su líder Abimael Guzmán, más conocido como el Presidente Gonzalo que representó la encarnación de la verdad del comunismo en el Perú en su calidad de cuarta espada, siguiendo el camino de Marx, Lenin y Mao. Todo los demás partidos y organizaciones de izquierda que discrepaban con el pensamiento Gonzalo eran revisionistas y aliados de la burguesía capitalista.

La construcción dicotómica política “amigo vs enemigo” utilizado por Sendero Luminoso fue reproducida estructuralmente en el discurso de la despatriarcalización pero en clave feminista.  La ecuación política es la siguiente "se lucha contra el patriarcado siguiendo la única vía de enfrentamiento planteado por el pensamiento María en su condición de creadora del concepto de la despatriarcalización o eres parte del patriarcado capitalista dentro de la tecnocracia de género de las ONGs, el Estado y los Organismos Internacionales (sobre todo ONUMUJER)". Parafraseando a Hamlet: “¡Ser, o no ser una verdadera feminista!, es como se puede resumir la tesis de la despatriarcalización.  

 Conferencia sobre la Despatriarcalización en la librería La Libre de Barranco

En mi calidad de generólogo, la observación central que hice a la tesis de la despatriarcalización fue la relación entre medios y fines que existe en su discurso. María Galindo expuso la tesis sobre la despatriarcalización como un fin que cuestiona la tesis de la igualdad de género y, al mismo tiempo, como un medio porque representa una metodología de acción personal y colectiva para desafiar la autoridad y desmantelar el patriarcado.  La exposición de María Galindo me hacía entender que la despatriarcalización (como un medio) sirve para despatriarcalizar (como un fin).  Había algo que no quedaba claro. 

Desde la perspectiva tecnocrática, la igualdad de género representa un fin (el qué), y según el Plan Nacional de Igualdad de Género 2012 – 2017 (PLANIG) del Perú, desde el enfoque de género se reconoce que la Igualdad: “no sólo se orienta al acceso a oportunidades, sino también al goce efectivo de los derechos humanos. El desarrollo con igualdad de género implica desmontar la cultura, los valores y los roles tradicionales de género que reproducen y mantienen la subordinación de las mujeres” (2012:18). Y la transversalización del enfoque de género es el medio (el cómo) para lograr la igualdad de género, según el PLANIG dicha transversalización significa que “en las políticas públicas es el proceso de examinar las implicancias que tiene para hombres y mujeres cualquier acción planificada, incluyendo legislación, políticas o programas en todas las áreas y en todos los niveles. Permite hacer de las necesidades e intereses de hombres y mujeres una dimensión integrada en el diseño, la implementación, el monitoreo y la evaluación de políticas y programas en todas las esferas políticas, económicas y sociales, de manera que hombres y mujeres se beneficien igualitariamente” (2012:13-14).  En esta herramienta de la tecnocracia de género se puede encontrar con claridad el fin y el medio, algo que no sucede con la despatriarcalización.

Le señalé a María Galindo que si la despatriarcalización representa un medio, entonces como tesis debe cuestionar y competir con la transversalización del enfoque de género. Pero si la despatriarcalización representa un fin, y fue la antesala de la pregunta de fondo: ¿Cuál es ese fin? ¿Para qué despatriarcalizamos? ¿Qué significa una sociedad despatriarcalizada? Si bien María Galindo no quiso responder, opte por comprar su libro y encontrar algunas respuestas.

Feminsimo Urgente ¡A despatriarcalizar! es el libro de ensayo de María Galindo en donde se plantea como hipótesis “estamos perdiendo nuestro lenguaje de lucha, que estamos perdiendo una especie de disolución. El Banco Mundial, los gobiernos y otros actúan como disolventes tóxicos de las luchas y los lenguajes feministas” (s/f:33). Y luego plantea la tesis de la despatriarcalización explicado en un manifiesto cuyo significado es: “una palabra matriz que servirá para derivar de ella: verbos, adjetivos y gerundios con qué deshacer, destruir, desarmar, desmontar, desestructurar, demoler, derribar y desarticular todas y cada una de las capas de las opresiones que nos sujetan (s/f: 174).  El punto central de mi pregunta lo encontré en el manifiesto que señala que la despatriarcalización no es un proyecto político finalista. Retomando la pregunta que le hice a María Galindo, la despatriarcalización es un medio sin fin porque representa una lucha para seguir luchando; como señala el manifiesto: acción permanente de desestructuración. 

El límite de la propuesta de María Galindo es que la despatriarcalización solo se queda en la desobediencia callejera con todos sus verbos, adjetivos y gerundios sin tocar el Estado. Según Mujeres Creando y María Galindo la despatriarcalización del Estado no es viable porque es una herramienta patriarcal.  No se puede luchar contra el patriarcado usando sus herramientas y por tal motivo, se lucha desde afuera para desobedecer permanentemente los mandatos patriarcales.

Si la despatriarcalización es como lo afirma María Galindo, entonces resulta irónico que ella utilice la metáfora de la “fábrica de hacer justicia” para que todas quieran ser “obreras” en su propuesta de acción permanente de desestructuración patriarcal. El detalle de las metáforas que se utilizan representan elementos patriarcales de la sociedad industrial: la fábrica y obreras. Y me imagino que el papel de burguesa capitalista de la fábrica llena de obreras sería la creadora del concepto de la despatriarcalización. Por ese motivo es necesario despatriarcalizar la despatriarcalización que utiliza elementos patriarcales (como la fabrica) para hacer comprender su tesis.   
 

Es necesario ubicar a Mujeres Creando y el discurso de la despatriarcalización en el marco de un debate sobre el quehacer del feminismo. Según Claudia Denegri Davies, el colectivo feminista boliviano Mujeres Creando fue creado en 1992 por Julieta Paredes y María Galindo y desde un principio plantearon la autonomía no solo como autogestión económica, sino también como posición política de pensamiento.  Denegri señala que en el año 2002 Mujeres Creando se divide y sus principales representantes siguen definiéndose como Mujeres Creando, una de ellas es María Galindo. Por ese motivo, la socióloga y activista feminista  Virginia Vargas señala que las autónomas conforman una corriente heterogénea que reúne un conjunto de expresiones, anarquistas y socialistas que se definen como las impulsoras de un cambio civilizatorio fuera del sistema patriarcal y, sobre todo, cuestionan a las feministas institucionalizadas.

Más allá de la primera impresión de encontrar un feminismo radical y reduccionista de la realidad encarnado en María Galindo, es necesario rescatar su posición frente a un problema común del movimiento feminista: el patriarcado. No hay que perder de vista la heterogénea conformación del movimiento feminista en donde la despatriarcalización es un árbol más (y no el único) del bosque feminista internacional. Como señala Virginia Vargas: “para ello no hay receta única, sino más bien el reconocimiento de múltiples agendas dentro de los feminismos, lo que está mucho más a tono de con la realidad actual de los movimientos (2008:158).  Algo que debemos aprender de la historia es que las recetas únicas (políticas, ideológicas y subversivas) han resultado ser peor que la enfermedad y la despatriarcalización no es ajena a la repetición de la historia.   

Referentes bibliográficos

Denegri, Claudia (2008) “Mujeres Creando. La creatividad como lucha política feminista”.  En La Mestiza. Revista Feminista, Nº 1. Lima: La Mestiza. 

Degregori, Carlos Ivan (2011) Qué difícil es ser Dios. El Partido Comunista del Perú - Sendero Luminoso y el conflicto armado interno en el Perú: 1980-1999. Lima: Instituto de Estudios Peruanos.

Galindo, María (s/f) Feminsimo Urgente ¡A despatriarcalizar! La Paz: Lavaca.

Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (2012) Plan Nacional de Igualdad de Género 2012 – 2017. Lima: MIMP. Encontrado el 3 de Noviembre de 2015 en http://www.mimp.gob.pe/files/planes/planig_2012_2017.pdf

Vargas, Virginia (2008) La Tensión entre “institucionalistas” y “autónomas” en los feminismos latinoamericanos.  En Viginia Vargas Feminismos en América Latina.  Se aporte a la política y a la democracia. Lima: Universidad Nacional Mayor de San Marcos Fondo Editorial de la Facultad de Ciencias Sociales, Programa democracia y Transformación Global y Centro de la Mujer Peruana Flora Tristan